La aparición del Virus SARS-CoV-2 a fines del 2019 en Wuhan, dio comienzo a la actual Pandemia de COVID-19, que produjo una gran cantidad de infecciones en la población de diferentes países durante el año 2020, con un nivel mortalidad que hizo sentir amenazada la sobrevivencia humana. Asimismo, dejo en evidencia que los Sistemas de Salud no estuvieron preparados para enfrentar una demanda de enfermos requiriendo atención ambulatoria; mucho menos si requerían una cama de hospitalización o una inalcanzable cama en UCI; situación vivida tanto en países desarrollados y con angustia apocalíptica en países pobres. Se resume lo vivido en el 2020, en la desesperación/esperanza por conseguir a como dé lugar un balón de OXÍGENO.
El nivel de contagios, es decir, virus replicándose en las células de un paciente y pasando a otra persona, hizo que una condición científica común en los virus fuera conocida por la comunidad mundial: LAS VARIANTES. Iniciamos sabiendo del virus de Wuhan, pero pronto dio paso al temor por “Variante Alfa” avanzando en el alfabeto griego hasta hace poco con la “Variante Delta”, más contagiosa en general y más patogénica en NO Vacunados. Hoy nos enfrentamos a una nueva variante: “OMICRON” definitivamente con altísima capacidad de trasmitirse que se acerca a la capacidad del virus del Sarampión, mas su poder patogénico ha disminuido ostensiblemente; pues las mutaciones en el genoma vírico están orientadas a lograr adaptarse al humano, y no a matar sus células; dado que si un virus muta aumentando su capacidad para destruir a su huésped, se condena a su propia auto-eliminación salvo que logre adaptarse a una nueva especie. Recordar que las Variantes se producen gracias a que los humanos seguimos facilitando su replicación, ello ocurre cuando NO nos cuidamos en evitar el contagio, cuando NO usamos Mascarillas, cuando NO realizamos Higiene de nuestras Manos, y desde el año 2021…..cuando NO NOS VACUNAMOS.
Las Olas Pandémicas en algunos países alcanza la cifra de seis, en el nuestro estamos en la Tercera Ola; pareciera paradójico que son países del Hemisferio Norte los que han tenido más olas que los del Hemisferio Sur, pero debemos reparar en algunos aspectos. Primero, los países pobres en la primera y segunda ola tuvimos niveles de contagio enormes, que significo que una gran parte de la población alcance una inmunidad natural. Segundo, la vacunación en nuestros países es reconocida en la mayoría de la población como clave para la salud, con poca desconfianza o grupos anti-vacunas, mas en los países desarrollados el nivel de población vacunada es baja o les ha significado enormes esfuerzos alcanzar más del 40-50% de vacunados, dejando más personas susceptibles a ser infectados.
Las Vacunas han sido una vez más pieza clave en la lucha contra la Pandemia, aun cuando con la variante ÓMICRON su protección a evitar contagios esta reducida, MANTIENE SU CAPACIDAD DE EVITAR ENFERMEDAD QUE LLEVE A HOSPITALIZAR, NECESIDAD VENTILACION MECANICO Y FALLECER. Por ello, quienes NO se han vacunado son los más susceptibles a Enfermedad Grave.
Evitar mas Variantes y Olas Pandémicas está en la responsabilidad de la humanidad, de cada uno de nosotros. La respuesta es EVITAR CONTAGIOS.
Médico Infectólogo
