El equilibrio es una capacidad muy importante que se desarrolla en los primeros años de vida, y que con el transcurso de los años puede ir disminuyendo. Depende de 3 sistemas muy importantes: Sistema Vestibular, Sistema Propioceptivo, la visión. El sistema vestibular puede estar localizado a nivel periférico (en el oído) y a nivel central (en el cerebro). El Sistema de Propiocepción involucra sensores ubicados a nivel del cuello, extremidades y columna que da información a nuestro cerebro de nuestra posición. La visión nos da información de la localización, profundidad y distancia.
Por lo tanto, la alteración de alguno de estos 3 sistemas va a conllevar a la alteración del equilibrio, lo cual se puede traducir como vértigo, mareo, inestabilidad, etc.
El vértigo es la sensación de rotación del entorno alrededor nuestro, o a veces sensación de que uno mismo es el que gira; pese a que no estemos en movimiento. Es un síntoma que puede pertenecer a múltiples enfermedades; sin embargo, su causa más frecuente es el Vértigo Paroxístico Posicional Benigno (VPPB).
Teniendo en cuenta que nuestro oído tiene 3 porciones (externo, medio e interno). El VPPB es una enfermedad del oído interno, causada por la salida de los otolitos (cristales de calcio) de su posición normal. Estos se almacenan en espacios llamados utrículos, pero ante algún movimiento repentino de la cabeza, se movilizan hacia los conductos semicirculares. Esto produce un estímulo a los ojos por lo que empiezan a moverse rápidamente, por lo tanto, la sensación de vértigo. Se pueden asociar otros síntomas como: inestabilidad, mareos, lateralización, náuseas, vómitos, debilidad.
Es una enfermedad que ocurre en episodios repentinos (paroxístico), de corta duración (menor a 1 minutos), pueden ser repetitivos, ya que se desencadenan por movimientos al recostarse en la cama, al girarnos en la cama o al agacharnos. No se asocia a síntomas como: pérdida de la audición, tinnitus (sonidos percibidos sólo por el paciente), cefalea (dolor de cabeza), ni migraña.
Según la intensidad del vértigo, el paciente llega acudir por consulta externa o por emergencia. El diagnóstico se realiza clínicamente, con un buen interrogatorio, examen físico, etc. Según esta evaluación, el médico solicita algún examen auxiliar diagnóstico como la resonancia en caso exista sospecha de que el vértigo pueda ser de origen central (cerebral).
Para el diagnóstico y tratamiento se realizan pruebas posicionales canaliculares, éstas se realizan luego de disminuir los síntomas agudos del vértigo o náuseas intensas, y según el lado afectado. El paciente debe acudir a consulta con un familiar para asistirlo luego de las maniobras, ya que muchas veces pueden generar nuevamente el vértigo.
Autora: Dra Bazán Porras Lucia Beatriz
